ANUNCIOS PROFETICOS

 Cuando en Fátima anuncié el milagro, si no hubiesen puesto presos a Lucía, Jacinta y Francisco este milagro hubiese sido más grande. Ahora lo repito nuevamente aquí: Vosotros mismos hacéis mal las cosas. Os dije que aún no era el terremoto, que lo iba a anunciar tres días antes y no habéis hecho caso. Igual que en Fátima, no se obedece y la gente no se convierte al Padre. Poned toda vuestra atención: Os dije que el terremoto iba a ser anunciado tres días antes, pero muchos por ahí dicen que será mañana, que falta un mes, que hoy o esta noche. De cierto os digo: No habrá tres días de anuncio. Solamente se deja la profecía: Cuando comiencen las hojas de los árboles a caer, cuando ya no haya madera, cuando en el cielo no alumbren ni la luna ni las estrellas, la tierra ha de despertar y se oirá mucho lamento, mucho grito. Os dije que lo anunciaría tres días antes, pero Vuestro Señor os ha privado de esta gracia de saberlo tres días antes. Pero vosotros mismos sabéis que Vuestro Señor es rico en misericordia. Habéis visto el pez en vuestras casas. Esta será vuestra protección. Pues de cierto os digo, todo lo de esta profecía va a ocurrir. Será a las tres de la mañana, pero no será anunciado tres días antes. No cesan de ofender a Vuestro Señor, que demasiado se le ha ya ofendido. (13 de abril de 1985)